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AHANAOA A. C.
Lic. Nut. Miguel Leopoldo Alvarado
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COMER PUEDE SER PELIGROSO: CUANDO DE COMIDA BASURA SE TRATA. COMIDA BASURA (JUNK FOOD): LA BASURA QUE COMEMOS / ES LA PLAGA DE LOS ALIMENTOS PROCESADOS
Consumen mexicanos 160 litros de refresco al año |
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Notimex Monterrey Sábado 25 de octubre de 2008 El consumo de refrescos por año en México asciende en promedio a 160 litros por persona, equivalentes a la acumulación de casi nueve kilogramos de sobrepeso, reveló la especialista en orientación alimentaria, Julieta Ponce Sánchez. La directora de Area de Nutrición del Centro de Orientación Alimentaria, señaló que lo anterior, aunado a los malos hábitos alimenticios y el sedentarismo, colocan a México en el segundo lugar mundial en obesidad. "México es uno de los primeros consumidores de refresco, 160 litros de refresco por persona, que representan más de 64 mil calorías y si lo transformamos en grasa van a ser cerca de nueve kilogramos más de grasa al año", expuso. Esto es "un consumo exagerado de bebidas azucaradas", por lo que instó a tomar medidas dietéticas, "sin olvidar que la única y la más importante meta que tenemos con el niño con sobrepeso y obesidad, es privilegiar el crecimiento". En segundo término, explicó, es necesario controlar los indicadores bioquímicos relacionados con muestras de sangre, glucosa, colesterol, triglicéridos, insulina o lo que el médico indique. "Hay que medir los azúcares, evitar refrescos y jugos, controlar el tamaño de la fruta, conocer el plato del bien comer, integrar más colores en los platos de los niños, a través de verduras y frutas, México tiene 360 variedades y se consumen sólo el ocho por ciento, no es posible eso", expresó. El ejercicio debe ser parte de este esquema de combate al sobrepeso y la obesidad, remarcó la nutrióloga que diseña y dirige programas de educación en temas relacionados a la nutrición, diabetes, sobrepeso y obesidad, el mercado de los alimentos y las tendencias en preferencias saludables del consumidor. Ponce Sánchez recordó que México tiene un 24.4 por ciento de su población con problemas de obesidad, tan sólo abajo de Estados Unidos, cuyo porcentaje es de 30.9. "El sobrepeso y la obesidad no es una enfermedad que se cura, esa es la mala noticia, es una enfermedad crónico degenerativa incurable", enfatizó. "Lo que sí podemos hacer es la modificación de conductas que no nos van a llevar un mes, ni dos, nos pueden llevar muchos años, pero los equipos multidisciplinarios los estamos desperdiciando, necesitamos medir fuerzas con las opciones de la industria alimentaria", indicó. Por su parte, el profesor en Nutrición en la Facultad de Medicina de la Universidad de Monterrey, Diego Benavides Hernández, señaló que los costos médicos para la atención de un paciente obeso de 30 años de edad equivalen a los de un no obeso de 50 años. Alertó sobre la caída en el porcentaje de infantes que practican actividades físicas durante los últimos años, principalmente en las ciudades, donde se invierte menos tiempo en labores al aire libre. Precisó que un 50 por ciento de los niños obesos hasta los seis años siguen con esa condición en la edad adulta, mientras que en el segmento entre 10 y 14 el porcentaje es de 80. |
Estudio muestra que por su alta concentración de sal y grasas tiende a generar más infartos La dieta occidental, ataque al corazón En comparación, un mayor consumo de frutas y verduras reduce el peligro. Para los habitantes de Latinoamérica hay otros factores que se suman a ese riesgo. |
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WASHINGTON (Reuters) - Un grupo de investigadores informó que las dietas basadas en patatas fritas, "snacks" salados y carne generan alrededor del 35 por ciento de los ataques cardíacos a nivel global.
Un estudio en 52 países demostró que las personas que consumían una dieta "occidental" basada en carne, huevo y comida basura eran más propensas a sufrir ataques cardíacos, mientras que quienes comían más frutas y vegetales tenían menos riesgo.
El estudio respalda hallazgos previos que mostraron que la comida basura y las grasas animales pueden generar enfermedad cardíaca, especialmente infartos.
El equipo del doctor Salim Yusuf, de la McMaster University en Ontario, Canadá, consultó a más de 16.000 pacientes, 5.700 de los cuales acababan de padecer su primer ataque al corazón.
Los expertos tomaron muestras de sangre e hicieron completar un formulario a cada paciente referido a sus hábitos alimenticios entre febrero de 1999 y marzo del 2003.
El equipo dividió a los voluntarios en tres grupos.
"El primer grupo fue etiquetado como 'oriental' por su consumo elevado de soja", escribieron los autores en su artículo publicado en la revista Circulation.
"El segundo grupo fue denominado 'occidental' por su elevada ingesta de alimentos fritos, snacks salados y carne. La tercera cohorte se etiquetó como 'prudente' por su elevado consumo de frutas y vegetales", añadió el equipo.
Las personas que comían más frutas y vegetales tenían un 30 por ciento menos de riesgo de ataque cardíaco comparado con aquellas que consumían poco o nada de esos alimentos, revelaron los investigadores.
Quienes seguían la dieta occidental corrían un 35 por ciento más de riesgo de padecer ataque al corazón comparado con las personas que consumían pocos o ningún alimento frito y carne. Los participantes con la dieta oriental tenían un riesgo medio de sufrir infartos, comparados con los demás.
El resultado es importante porque no estaba claro si eran los alimentos en sí o algo más lo que generaba el riesgo cardíaco.
La dieta basada en la soja podría ser neutral en lugar de protectora por su elevado nivel de sodio, añadieron los autores. El consumo alto de sodio puede incrementar la presión arterial y el peligro de infarto y accidente cererbrovascular.
-- Contribuye comida chatarra en recreo a obesidad infantil |
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Isabel Abad Trejo El Universal Martes 21 de octubre de 2008 La falta de lugares recreativos, así como los productos "chatarras" que compran los niños en las cooperativas de las escuelas del Distrito Federal ha provocado que la niñez mexicana ocupe el segundo lugar a nivel internacional en obesidad, aseguraron especialistas. Lo anterior es el resultado de que los niños en edad escolar consuman en la hora del recreo productos "poco nutritivos" como gorditas, memelas, quesadillas y chocolates. Durante el foro sobre "Alimentos y Obesidad en las escuelas del Distrito Federal", el secretario de Educación Pública del DF, Axel Didriksson afirmó que "el ambiente escolar ha dejado de ser un espacio de pluralidad, discusión y aprendizaje para convertirse en una fábrica de obesos iletrados". Entre los problemas que ocasiona la mala alimentación sobresalen "la presencia de violencia en las sociedades; una población que está mal alimentada es propensa a presentar actos violentos. Si queremos acabar con esta problemática tenemos que atender de forma urgente el tema de alimentación", afirmó. Asimismo, ratificó que para poder acabar con la violencia que se vive en las escuelas del Distrito Federal primero se tiene que combatir la mala alimentación del alumnado. El funcionario adelantó que para combatir esta situación en los próximos días comenzará una campaña de alimentación, la cual estará enfocada en la educación física, el deporte, "con estas acciones pretendemos educar a los infantes en materia alimenticia". "Esta estrategia", mencionó, "estará dirigida a las mujeres, ya que son ellas las que tienen una fuerte influencia en la sociedad, son ellas por lo general las responsables de la alimentación familiar". La campaña, precisó elsSecretario de Educación Pública local tiene el objetivo de reducir el consumo de alimentos "chatarra" entre la población escolar que asiste a las primarias del Distrito Federal. |
José Antonio Román
Ampliar la imagen Botargas vegetales de organizaciones que protestaron frente a la SEP, en el Centro Histórico Foto: Ap
Con la exigencia de que los alimentos chatarra se retiren de las escuelas, como medida urgente y básica para enfrentar el deterioro de los hábitos alimentarios de los escolares, diversas organizaciones civiles encabezadas por El Poder del Consumidor se manifestaron frente a las instalaciones de la Secretaría de Educación Pública (SEP), y responsabilizaron a la titular de la dependencia, Josefina Vázquez Mota, de ser uno de los principales obstáculos para que lo anterior se lleve a cabo.
Alejandro Calvillo, director de El Poder del Consumidor, dijo que diversos estudios realizados por entidades públicas concluyen que en México las escuelas se han convertido en fábricas de obesos, y destacó que una causa principal es la venta de comida chatarra, es decir, alimentos y bebidas no recomendables para niños y jóvenes.
Con botargas de personajes creados por esa organización, como sana zanahoria y sana manzana, se manifestaron frente a la sede de la SEP, en el Centro Histórico, donde criticaron "la complicidad" de las autoridades educativas del país con empresas refresqueras o de comida chatarra, a las cuales, con el argumento de "mejoras en los planteles educativos" se les permite permanecer en ellas con productos de muy mala calidad alimenticia.
El director de El Poder del Consumidor, incluso dijo que su organización ya había advertido en septiembre de 2007 que la titular de la SEP "estaba haciendo el juego" a Pepsico y Coca-Cola, y fortaleciendo el posicionamiento de estas empresas en las escuelas, al acoger sus campañas Vive saludable escuelas y Movimiento bienestar, respectivamente, las cuales fueron presentadas engañosamente como programas de promoción de la actividad física y los buenos hábitos alimentarios.
Publicidad autorregulada
Por otro lado, la industria de los alimentos y bebidas firmó un código de autorregulación publicitaria dirigida al público infantil, denominado Código Pabi, que –según los empresarios– pretende contribuir en el combate al sobrepeso y la obesidad, que afectan particularmente a ese sector de la población, aunque no plantea una reducción en la frecuencia de anuncios de dichos productos, sino únicamente la eliminación de mensajes engañosos.
Dicho código tampoco implica sanciones económicas para las empresas que continúen con atribución de bondades inexistentes en la promoción de los productos de consumo, como sí sucede en España, país que se tomó como modelo y donde se fijan sanciones de hasta 180 mil euros, y que cuenta con órganos de representación que examinan los anuncios antes de ser transmitidos en los medios de comunicación.
Durante la firma del acuerdo, que entrará en vigor el primero de enero del próximo año, el secretario de Salud, José Ángel Córdoba Villalobos, recordó que México ocupa el segundo lugar mundial en sobrepeso y obesidad, e indicó que, en promedio, los niños ven 12.5 horas de televisión a la semana, que se traducen en 61 anuncios publicitarios por día y unos 22 mil al año.
De éstos, cerca de 42 por ciento promueven alimentos, 39 por ciento golosinas, 12 por ciento frituras, 9 por ciento bebidas azucaradas, 8 por ciento galletas y 7 por ciento pastelillos. El funcionario subrayó que entre estos productos aparecen leyendas instantáneas con mensajes "que nos dicen: aliméntate bien, come frutas y verduras". En contraste, expresó, los anuncios relativos a agua, frutas y verduras se transmiten raramente.
Agregó que 40 por ciento de productos dirigidos al público infantil fomentan el consumo de alimentos que propician la obesidad, al consumirse en exceso. Más de la mitad de ellos, apuntó, no serían recomendables como parte de una dieta saludable, por ejemplo, para controlar el peso.
El funcionario federal señaló que aunque no es posible vincular directamente la promoción de alimentos con la creciente tasa de obesidad en México, sí se cuenta con evidencia científica que sugiere que es un factor influyente muy importante.
Finalmente, dijo que la obesidad infantil es uno de los principales problemas que enfrentará México durante el siglo XXI, lo que podría llevar a una disminución en la esperanza de vida.
Con información de Erika Duarte
Piden regulación de empresas que venden comida chatarra |
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Claudia Bolaños El Universal Ciudad de México Sábado 20 de septiembre de 2008 La asociación civil El Poder del Consumidor pidió que una regulación gubernamental a las empresas que venden comida procesada, denominada "chatarra", ante el creciente número de niños obesos; dichas compañías usan, en muchos casos, publicidad engañosa, consideró Alejandro Calvillo, presidente de dicha asociación. Varias de estas empresas ponderan los regalos que traen sus productos, y resaltan falsas propiedades nutrimentales. Dicha asociación civil ha conseguido que una marca de cereal modificara su publicidad pues era falsa al indicar a los niños que al comerlo serian tan fuertes como un felino, cuando en realidad su consumo era similar al de sólo un bolillo con azúcar. Dichas compañías crearon un código de autorregulación para dar prioridad al bienestar de los niños mexicanos, pero esas mismas medidas ya lo hicen en los Estados Unidos desde fines de los setenta, pero sin éxito. "El resultado en ese país ha sido un rotundo fracaso partiendo del hecho de que las mismas empresas que lo acordaron lo han violado de manera sistemática sus acuerdos". Calvillo resaltó que México es el país donde hay más niños con sobrepeso y sin embargo, no se pone un alto a las empresas que aprovechan la vulnerabilidad de los niños a ser engañados por la publicidad, y se aprovechan de su ingenio y fantasía, y de la falta de capacidad para entender el propósito de la publicidad. Por ejemplo, en ejercicios realizados con niños menores de tres años, sólo han aceptado comer zanahorias si éstas se las dan dentro de "cajitas felices". Ayer el Consejo de Autorregulación y Ética Publicitaria, CONAR A.C., integrada por las principales empresas productoras de alimentos procesados, presentaron un un código de autorregulación. Parte de ese código indica que la publicidad de productos alimenticios no debe afectar o ir en contra de modos de vida saludables. Teniendo en cuenta la dificultad que tienen los niños para distinguir el producto del premio, la publicidad debe centrar la atención del niño en el producto y dejar claramente en segundo plano el mensaje del premio; la publicidad no debería estimular las expectativas no razonables de los niños acerca de las cualidades de los productos. |
![]() | ![]() | Gerardo Lissardy París, Francia |
![]() ¿Podrán los franceses mantener una dieta equilibrada pese a la recesión? |
La duda se planteó con más claridad que nunca esta semana a propósito de un informe parlamentario que recomendó aumentar los impuestos sobre la "comida chatarra", como parte de una amplia batalla contra la obesidad.
Los franceses, orgullosos de platos como el foie-gras o el coq-au-vin, solían mirar con desagrado el apetito de otros por las hamburguesas y las papas fritas, y el consejo parlamentario parecía destinado a caer en buen terreno.
Sin embargo, el rechazo de tres ministros de gobierno a la idea, con el argumento de que el contexto económico la vuelve inviable, sugiere que algunas cosas están cambiando en Francia, también en la mesa.
Amenaza
![]() Uno de cada dos adultos en Francia tiene sobrepeso y uno de cada seis es obeso. |
En cierta forma, esto contrasta con la imagen que el mundo tiene de Francia como un país de gente flaca, plasmada en el libro "Why French women don't get fat" (Por qué las mujeres francesas no engordan) que se editó en Europa y América.
Su autora, Mireille Guiliano, sostiene que el secreto de la "paradoja francesa" es saber disfrutar de los alimentos, sin excesos y conscientes de lo que se come, su variedad y equilibrio.
Sin embargo, esa receta no funciona para todos los franceses.
![]() | ![]() ![]() Anne-Sophie Joly, CNAO |
"Pero también es cierto que tenemos un consumo alimenticio, en términos de calorías, muy superior al que deberíamos", agregó Joly en diálogo con BBC Mundo.
Más grasa, más caro
![]() Una de las propuestas sugería bajar los impuestos de las frutas y legumbres. |
Esta semana, un grupo parlamentario creado para prevenir la obesidad en Francia emitió un reporte con 80 propuestas concretas para enfrentar el problema.
Los consejos son diversos, desde mejorar la calidad de los alimentos que se venden en las cantinas de las escuelas hasta limitar la publicidad de los productos con altas calorías.
El informe también sugiere hacer de la lucha contra la obesidad una gran causa nacional el año próximo.
Pero sin duda la propuesta vedette fue la de aumentar los impuestos a las comidas con exceso de grasas, azúcar o sal, y a cambio bajar los de las frutas y legumbres.
Dieta de pobres
La ministra francesa de Salud, Roselyne Bachelot, descartó la propuesta el mismo martes en que fue presentada.
![]() | ![]() ![]() Roselyne Bachelot, ministra de Salud |
Argumentos parecidos plantearon los ministros de Presupuesto, Eric Woerth, y de Trabajo, Xabier Bertrand, quien dudó de que los cambios impositivos generen necesariamente "cambios de comportamientos".
Francia entró oficialmente en recesión tras registrar dos trimestres consecutivos de crecimiento negativo, admitió el viernes el gobierno.
![]() Un 2% de la población come diariamente en McDonald's. |
El tiempo promedio de almuerzo de los franceses apenas supera la media hora, mientras un cuarto de siglo atrás era más del doble.
"Mucho por hacer"
Pese a todo esto, en Francia los niveles de obesidad son menores que en Estados Unidos y otros países de Europa.
Recientes estudios presentados en el congreso europeo sobre obesidad sugieren que el problema en los niños tiende a estabilizarse.
El Estado francés es uno de los más activos del continente en la lucha contra la obesidad, con diversas iniciativas recientes, incluida la prohibición de máquinas expendedoras en las escuelas.
"El Estado francés se mueve a diferentes niveles, al nivel médico o para todo público", dijo Joly. "Pero todavía queda mucho por hacer".Detener el aumento de las enfermedades crónicas
La epidemia de todos
por Víctor Hugo Durán
Se creía que las patologías crónicas eran "enfermedades de los ricos", pero ya no es así. Los países en desarrollo están padeciendo un aumento repentino de muertes y enfermedades debidas al cáncer, las cardiopatías, los accidentes cerebrovasculares y la diabetes.
La buena noticia es que casi todo esto puede evitarse.